Este palo de madera de 12 cm es una obra maestra de la artesanía. Su mango de forma única garantiza un agarre cómodo y seguro, lo que lo hace ideal para tocar cuencos tibetanos.Lo que distingue a este palo es la ausencia de cuero, lo que permite un sonido puro y sin adulterar. Es perfecto para quienes buscan una experiencia auténtica y tradicional.