
Cosas buenas, cosas bonitas, cacao… ¡y pulseras! En nuestro local cada bocado tiene una historia (¡y no sólo una pequeña!)). Nuestras barras son el resultado de una colaboración directa con la cooperativa agrícola Fiedifoue, donde cultivamos granos de cacao con amor y sin concesiones. But that s not all! Gracias al Taller de Géraldine, un capricho olvidado vuelve a estar de moda: ¡los bricelets! Y como no nos gusta el desperdicio, revalorizamos sus trocitos dorados y crujientes incorporándolos a nuestras creaciones de chocolate. Resultado ? ¡Aún más delicia y un toque de originalidad irresistible! Chocolate con arándanos: la intensidad del chocolate, el sabor ácido del arándano y una textura que sorprende… ¡sólo mejor! Una mezcla tan atrevida como adictiva. miÉtica y Transparencia Desde el grano hasta la barra, ¡lo dominamos todo! Nuestros granos se cultivan y procesan con cuidado, nuestros bricelets son sublimes y cada ingrediente se elige con cuidado. ¡Porque comer bien es bueno, pero comer bien con sentido es aún mejor! Prueba, enamórate… y sobre todo, ¡disfruta sin moderación!