Crema de Manos con Manteca de Karité y Cítricos

Crema de manos ecológica certificada sin ningún ingrediente de origen animal. Esta nueva formulación de textura suave y aterciopelada deja las manos secas e hidratadas en pocos instantes. La adición de los aceites de Rosa Canina y Rosa Mosqueta refuerza el poder curativo de la Manteca de Karité mientras que la nueva fragancia Limón hace que el producto sea aún más agradable. El uso de desinfectante de manos y el lavado frecuente están dañando claramente la parte más externa de nuestra piel. Por eso creamos esta crema de manos nutritiva e hidratante, rica en manteca de karité, aceite de girasol, aceite de argán y aloe vera. Las propiedades emolientes y reparadoras de la piel de los aceites y mantecas utilizadas con las propiedades del Aloe Vera hacen que esta crema sea especialmente adecuada para pieles secas y agrietadas. El aceite de Rosa Canina y Rosa Mosqueta son cicatrizantes naturales que ayudan a cicatrizar las fisuras. Los aceites esenciales de Limón y Jojoba tienen propiedades antisépticas y regeneradoras de la epidermis. Esta crema se absorbe fácilmente y tiene un agradable aroma cítrico. En caso de microfisuras, la Manteca de Karitè es un excelente cicatrizante junto con los aceites esenciales de Rosa Mosqueta y Rosa Canina. Este producto destaca por ser profundamente hidratante y nutritivo. ¡Excepcional para tener manos tersas y suaves! Modo de empleo: utilizar una pequeña cantidad de crema y masajear hasta su absorción. El producto se concentra. Es un producto orgánico hecho a mano en Italia, rico en ingredientes naturales. No se han utilizado OMG, PEG ni parabenos. No se usaron perfumes. Las fragancias vienen dadas únicamente por los aceites esenciales presentes. No probamos productos terminados o ingredientes en animales, no encargamos pruebas en animales de productos terminados e ingredientes, y no hemos utilizado ingredientes probados en animales por fabricantes desde al menos 2013 (año de establecimiento de la empresa). Biocosmetics 70 certificado por el Suolo & Salute Institute