Pequeño zorro acostado en papel 3D
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Si recibe el apodo de caballito de mar, seguramente no sea por su habilidad para correr ni por su vivacidad. Este caballito de mar se pasa el día vagando, dejándose llevar por las corrientes marinas, perdido en sus pensamientos. No tiene sentido darle vueltas, él solo tiene una filosofía, suavemente por la mañana y no demasiado rápido por la tarde, ser un gran pionero en la defensa de la igualdad de género. De hecho, la causa femenina está particularmente cerca de su corazón, tanto que incluso habría aceptado llevar a los bebés en él. Si buscas un compañero simpático, tranquilo y discreto, te aconsejamos que lo adoptes además aportará un poco de frescura a tu interior.